22 d’agost 2012

Crónicas pirenaicas

Tras una semana de agobiante calor y ocio total (excepto por la parte de traducir) en Barcelona, tocaba una nueva escapada con la excusa de un torneo. En esta ocasión el viaje era corto: nada como salir de Catalunya para encontrarte el mejor torneo del Circuito CatalánSonrisa

No sé qué explicar del abierto de Andorra que no haya dicho ya, aparte de que deberíais ir a jugarlo cada año. Uy, que eso me suena que ya lo había dicho. En fin, si queréis más información hay crónicas de cada ronda aquí, todas las fotos que os apetezca ver y más aquí, y los resultados de cada ronda aquí. Los discursos que dábamos Óscar y yo cada día antes del inicio de ronda no están disponibles jajaja.

En principio la idea es NO hablar de ajedrez, pero este año todas mis partidas han sido curiosas, así que voy a hacer una excepción y centrarme en lo que pasó en mi tablero cada día.

Ronda 1: posiblemente acabé la primera, incluso antes que el que ganó por incomparecencia, que tardó media hora. La fórmula empleada por mi rival fue Rose + Stone = firma debajo del 0.

Ronda 2: en plena epidemia de pajas mentales (una más) en el foro de AjedrezAstur, derbi asturiano, o no, entre Gabriel del Río y yo. Tablas en la típica partida que de cara al exterior es un truño pero los análisis son entretenidos.

Ronda 3: mucho GM y mucho +2500, pero mi rival tenía más pinta de atleta que de ajedrecista. De hecho por la mañana metió mil goles. Tal vez estaba repasándolos mentalmente mientras pensaba 50 minutos en la jugada 11 (lo que desde entonces se denomina “hacer un Berczes”). Gracias a que estaba muy mal de tiempo logré pasar el control y no palmar antes, y cuando eran tablas se hizo justicia y me dejé un truco.

Ronda 4: mi rival, tras 10 años sin jugar, se fue a un torneo a Tailandia. Bueno, y ahora a Andorra. Muy simpático, sobre todo cuando entre todas las jugadas de dama de que disponía para rematarme optó por entregarla a cambio de dos torres, con posición incierta donde se dedicó a hacer malas hasta que abandonó.

Ronda 5: negras con Panelo. Los antecedentes hacían presagiar rosco terrible, pero sus entrenamientos con el resto del Komando Eskobilla ayudaron a que no estuviera del todo fino. Tablas.

Ronda 6: todos los morbosos estaban de fiesta porque me tocaba contra el Alf. La partida sirvió para constatar que mucha gente está fatal de lo suyo y que, afortunadamente, gente a la que tenía catalogada como normal es efectivamente normal. Sigue siendo un misterio para mí que los mismos que ponen el grito en el cielo si alguien hace tablas rápidas para asegurar un premio vean lógico y casi obligatorio que hagas tablas rápidas con tu pareja porque sí. En fin, en una posición donde estaba algo pasiva me dio el bajón y no hubo opción.

Ronda 7: victoria prácticamente sin jugar. Tuve la fortuna de que mi rival se metiera voluntariamente en una posición donde lo más probable era que las negras ganasen solo con un poco de cuidado… ¡y yo llevaba negras! SonrisaEn la sala de análisis había un señor extranjero que intentaba descifrar un tríptico del “festival” de Benidorm (como magnífico evento que es, solo tienen información en castellano), con tan mala suerte para los organizadores que me preguntó a míLengua fuera

Ronda 8: derroté a Mihail Marin. Vaaaaaale, a Victor-Mihail Marin, su hijo, pero bueno, también hay gente que dice que ganó el open de Moscú sin especificar cuál, así que no veo por qué no iba a colar esto. Por si preguntan, Patty 1 – Marin 0.

Ronda 9: y sí, es matinalTristeTorres-Patty comenzó con la misma línea que Torres-Szabo y Panelo-Patty en la ronda 5. Cuando el blanco tiene que retirar un caballo y hay tres casillas posibles, en Torres-Szabo se empleó la más interesante, en Panelo-Patty la principal y, tras cierta reflexión, en Torres-Patty la mala. Lástima que no pude rematar mi buena posición+ventaja material porque casi me meten un Short-Timman a pesar de que lo veía venir de lejos.


Total, que al no ganar la última quedé detrás del Alf. ¡Porca miseria! Eh, pero hice plata… ¡y femenina!