Del “Me abuuuuuuurrooooo” al “ni puta idea” (I)

Para quien pueda interesarle: esta entrada se empezó a escribir al tiempo que se disputaban las seis primeras partidas del Mundial entre Anand y Gelfand, pero por diversos motivos, entre ellos un fin de semana zascandileando alejada del ordenador, no se completará y publicará hasta ahora. Entre medias he terminado de leer “El Padrino” y tengo ganas de cargarme gente xD

Ha comenzado el Mundial de ajedrez, que ahora es el Campeonato del Mundo Mundial Unificado y no solo de alguna asociación chunga (o sea, la FIDE es una asociación chunga, pero es oficial y eso, ya me entendéis) y me aburro soberanamente. Pero no por las partidas, ojo. Dos de los mejores jugadores del mundo se han preparado durante meses para una cita tan importante y ahora luchan de dos en dos días para superar al otro y no ser superados en un combate demasiado corto. A mí lo que me aburren son los comentarios que leo por ahí.

Para empezar, decir que eres aficionado al ajedrez, que amas el juego, sigues la actualidad, admiras a los grandes campeones y blablabla y soltar seguido que te aburre ver las partidas del Campeonato del Mundo me parece el nuevo “a mí no me molestan los homosexuales, pero que no se besen en público, que se queden en sus casas”. ¿En qué quedamos? ¿Qué parte de “Campeonato del Mundo”, “el que gane será el nuevo campeón del mundo” no has entendido? ¿En serio te importa una mierda y solo quieres ver un tipo de ajedrez, con sacrificios y ataques de mate? Se me ocurren muchos sitios a donde enviar a esa gente, pero ya lo ha hecho Arne Moll con estilo y buen criterio.

Luego están los que no se cansan de poner que Gelfand no merece estar en la final del mundial y plantean dos grandes objeciones: 1) que Carlsen o Aronian deberían estar jugando la final y 2) que Gelfand “no tiene el “nivel”. Debemos asumir que 1) a Gelfand le gastaron una broma y donde ponía “Candidatos al Campeonato del Mundo” en el torneo que ganó, era una errata y 2) todos esos críticos son mejores  que Gelfand, imagino que del tipo clásico “yo porque no me dedico, que si no…”

La gente tiene demasiados módulos de ordenador en casa y muy poca memoria. Una máquina da +0.31 a favor de un jugador sabe George cómo, y ya “no son tablas, tienen que seguir, cómo no ve que…” seguido de una ristra de análisis precisos desde el sofá de casa, que es el lugar desde donde se arregla el mundo en dos patadas. Además, como esto de que un match por el título mundial comience con varias partidas empatadas es la primera vez que pasa…

La conclusión general es que ha muerto el ajedrez. Ha muerto, no porque los autoproclamados aficionados no sean capaces de respetar al campeón del mundo y al aspirante, ni de seguir una partida con ánimo de aprender y no de ver gorrazos y errores, sino porque muchas partidas acaban en empate y entonces los millones y millones de personas en todo el mundo que siguen el ajedrez y todos esos millonarios que quieren patrocinar eventos lo dejarán porque no es emocionante. Claaaaaaro. Acabo de leer en otra genial columna de Arne Moll que “el ajedrez no lo destruyen los ordenadores, sino la gente que dice que el ajedrez morirá”.

Se me ocurren dos opciones para calmar a las masas: o Anand y Gelfand filtran a la prensa que son pareja para que el público entienda que, aunque el ajedrez pierde, triunfa el amor, o dan juntos una rueda de prensa diciendo que lo sienten mucho, que se han equivocado y que no volverá a pasar.

No puedo dejar de mencionar a los genios (que hubo varios, principalmente en ChessVibes y en el muro de CaraLibro de Leontxo García) que, desafiando a esos estudios que aseguran probar que el ajedrez desarrolla la inteligencia, proponían adoptar el sistema de puntuación 3-1-0 en matches “para incentivar las victorias”. ¡Jugones!

Continuará… con el análisis de la segunda parte del match. Bueno, con el análisis de la reacción del público, claro xD