Summer plans

Ha comenzado la temida temporada estival en Barcelona. El sol ataca todo el día (menos el sábado por la tarde que diluvió y para andar 5 minutos en Sabadell nos mojamos más que el que lo inventó. Que nadie me niegue ya ha empezado el verano: ¡ya hay torneos del Circuito!

El 20 de junio, con la tradicional degustación de cava y cañas de fin de curso, quedo libre para zascandilear por ahí. Por primera vez desde que soy catalana, NO jugaré Montcada. Sorpresón, sorpresón. No porque tenga ningún problema con el torneo (aunque eso de la ronda matinal…), sino porque me coincide con otro. Así que este año si hay cronista será otra y, si no, pues algún cronisto. Eso sí, a Montcada habrá que ir algún día para disputar el tramo de pipas.

Parece que Marcos hará una escala aquí en uno de esos viajes de los que es mejor no pedir explicaciones. P-Chan está afilando las garras tras unas declaraciones polémicas en las que le llamaba “cansino” y “feuno”.

Del 2 al 9 de julio me voy con el Alf a la Picardía, que guiños guiños aparte está al norte de Francia. Concretamente a un sitio de esos que tienes que poner un zoom potente en GoogleMaps para que salga. Posiblemente el clima sea más benigno que aquí y además imagino que lograré no jugar con Muñoz (en Sant Boi, ooooootra vez).

Ah, la France! Quesos y vinos, gente hablando catalán con pronunciación extraña y lo que mola jugar un torneo donde no conoces a nadie.

Después, tras unos días de descanso… el mejor torneo del mundooooooooooo. Buen ajedrez en los Pirineos en julio: buen clima, preciosas vistas, excelente organización, y evidentemente me refiero a Andorra. Hasta se ofrecen a dejar un montón de planillas a la vista junto a un ordenador descuidado.

Total, que en julio visitaré dos países. En agosto a priori Badalona y Asturias, más que nada porque las alternativas propuestas, Padrón y Monzón, no motivan nada nada e imagino que este año no hay alegre expedición a Ferrol.