Me hace gracia que siempre que digo que estudio Traducción e Interpretación la respuesta suele ser "uy pues entonces sabrás muchos idiomas ¿no?". En realidad solamente necesito dos aparte de mi lengua materna, lo cual no me parece demasiado. En el tremendo debate político sobre la calidad de la educación en España salió también el tema de las lenguas extranjeras y el bajo nivel de los españoles en esa materia. Personalmente considero que, si no queremos estar a la cola de todo, los chavales deberían terminar la educación secundaria con un nivel muy avanzado de inglés y uno respetable de otra lengua como el francés, el alemán, el ruso o ¿por qué no? el árabe o el chino. Me llamarán exagerada, y desde la situación actual desde luego es una exageración pretender llegar a esos niveles, pero sería lo ideal. Total, soñar es gratis.
Los idiomas me han parecido desde siempre importantes, o al menos interesantes. Ya de pequeña leía la parte posterior de las cajas de galletas, donde venían los ingredientes en varias lenguas:-) Otra fuente de sabiduría más bestia son las advertencias de seguridad de los huevos Kinder:-) Pero tampoco soy una friki, al menos no tanto como muchos de los miembros de UniLang, donde últimamente no tengo ni tiempo ni conexión para participar ni seguir los foros:(, o el Pack y sus CDs de swahili y su colección de Assimil. He ido aprendiendo un poco o un mucho de unas cuantas lenguas, pero este aprendizaje siempre ha estado justificado. Apa comparó una vez muy acertadamente mi afición/obsesión por aprender idiomas con su afición/obsesión por aprender juegos de cartas.
Castellano: mi lengua materna. Afortunada yo por crecer aprendiendo una lengua tan bonita y tan útil, y desgraciada por no crecer con más de una.
Inglés: desde 5º de EGB. Más o menos desde esa edad me he ido aficionando a la música en ese idioma, así que mi dominio del inglés ha crecido con mi afición al brit pop. De ahí me viene también la vocación de traductora xD. En 1º o 2º de BUP, en vista de que no abundaban las carreras interesantes porque la mayoría eran de Ciencias:P, decidí con buen criterio que si había una carrera que versaba sobre aprender inglés y leer novelas, era la mía. Además cuando me iba a jugar torneos podía tanto leer novelas como practicar inglés, así que encima todo eran ventajas:)
Catalán: actualmente mi segunda L2. Tras comprobar que entendía prácticamente todo sin apenas esfuerzo, a pesar de que mi input en esa lengua era sobre todo torderés;-), como los catalanes que conocía por ahí me caían bien (ahora que lo pienso, sí que soy rara), y cuando conocí BCN me enamoré (de la ciudad, mal pensados) me dije "pues ya puestos lo podía aprender en condiciones". Fueron los 8 créditos más fáciles de mi vida en UniOvi. Ya instalada aquí, cada día aprendo algo nuevo, y aunque no se lo crean los de TeleMadrid, no me pegan ni me denuncian cuando no lo uso.
Alemán: cuando entré en Filología Inglesa tenía que escoger un segundo idioma. De aquellas leía muuuuuucha literatura francesa (hoy en día "Madame Bovary", "Rojo y Negro" y "Las amistades peligrosas" siguen en mi lista de libros favoritos) y casí cojo el francés... pero el destino en forma de pueblo polaco donde la gente solamente entendía alemán y ruso se interpuso en mi camino. En realidad viajando por Europa, donde no te entiendan en inglés probablemente te entiendan en alemán, así que igualmente parece una lengua bastante útil. Más tarde he tenido la oportunidad de conocer Alemania y me alegro de la elección que tomé hace ya... Bufffff 10 años!!!!! Como Sylvia Plath, viviré obsesionada con dominar el alemán pero no lo lograré nunca.
Ruso: mmmmmm, igual sí que soy rara. Hace muuuuuuuchos años me leí "Mi Sistema" y me encantó, pero había cosas muy raras, vamos, que la traducción no era muy buena. Así que, movida por esos ideales que todos tenemos en la adolescencia, se me ocurrió que aprendería ruso para traducir ese libro bien y que la gente pudiera disfrutarlo. Y empecé así, por mi cuenta. Posteriormente fui a un año de clases y la verdad es que aprendí bastante, pero lo tengo medio olvidado. Cuando haya tiempo volveré. De momento me sirve para leer los carteles con los nombres de los jugadores, y en Bulgaria podía entender rótulos de comercios, de tráfico, etc. También me ayudó a comer en Polonia porque muchas palabras se parecen.
Portugués: en Oviedo tenía que hacer créditos de libre elección, y de todo el catálogo de asignaturas solamente me atraía hacer algún idioma porque el resto de opciones me parecían un peñazo. ¿Qué mejor que otra lengua de la Península? Además en los saraos internacionales los portugueses son de lo mejor que hay: buena gente, simpáticos, y no están todo el día hablando de ajedrez.
Latín y griego: los hice en el bachillerato y se me daban bastante bien. El latín ayuda muchísimo a aprender y a entender otras lenguas románicas y el griego, además de para ver partidos de baloncesto, para entender "palabros" científicos.
Griego Moderno: mis últimos créditos de libre elección en UniOvi. Es que la ofertaban por internet... Gracias a la base de griego clásico, estaba tirado. Si en octubre voy al Europeo desempolvaré antes mis apuntes.
Holandés: sabiendo inglés y alemán, es relativamente fácil leer holandés. He estado dos veces en los Países Bajos: aquello es precioso, la gente es majísima... me da pena no saber holandés pero todos saben inglés, alemán, y los ajedrecistas holandeses hablan castellano mejor de lo que yo hablaré su lengua en toda mi vida. Para leer rótulos y cartas de restaurantes me arreglo, eso sí, si me hablan ni entiendo un carajo.
Esperanto: por la influencia de algunos UniLangers, una temporada me dio por aprenderlo. Tampoco progresé demasiado porque estaba a más cosas, pero tiene su utilidad.
Euskera: siempre había tenido curiosidad y ahora llevo dos meses de clases en la UAB. Es que la última vez que fui a Pamplona me dio pena comprobar que en todos los canales de la tele entendía alguna palabra menos en ETB. Ya está arreglado: en Donostia vi un rato de un partido de baloncesto (mientras mi novio me llamaba friki no sé por qué:P) y pillaba cosillas:-)
Polaco: por supuesto no tengo el dominio de Wiktorku, y de hecho solo me acuerdo de cómo se piden cacharros (memoria selectiva), de dar las gracias (educación ante todo) y de decir "no hablo polaco" (la frase "no hablo X" me sale en muchos idiomas, y es tremendamente útil si allá por donde vas se te acercan todos los raros, como es mi caso). En el pueblecito polaco en el que jugué un Mundial sub20 me compré por (creo que literalmente) cuatro duros un librito de frases Hiszpansko-Polski que dio mucho juego, sobre todo cuando había que conseguir comida. Con ese libro hice mis pinitos en la interpretación de enlace:-)
Rumano y sueco: lo típico que haces amigos de un sitio y aprendes unas palabras de su idioma y ellos del tuyo. Aquellos maravillosos años en que venían rumanos majos a jugar Avilés... y aquellos suecos tarados que también estaban haciendo tandem en Bochum... Pero bueno, como todo lo que no se practica, lo he olvidado casi por completo.
Pues eso, que tampoco soy tan rara... ;-)
P.d. El título de la entrada es de un libro muy mítico de George Steiner.
Los idiomas me han parecido desde siempre importantes, o al menos interesantes. Ya de pequeña leía la parte posterior de las cajas de galletas, donde venían los ingredientes en varias lenguas:-) Otra fuente de sabiduría más bestia son las advertencias de seguridad de los huevos Kinder:-) Pero tampoco soy una friki, al menos no tanto como muchos de los miembros de UniLang, donde últimamente no tengo ni tiempo ni conexión para participar ni seguir los foros:(, o el Pack y sus CDs de swahili y su colección de Assimil. He ido aprendiendo un poco o un mucho de unas cuantas lenguas, pero este aprendizaje siempre ha estado justificado. Apa comparó una vez muy acertadamente mi afición/obsesión por aprender idiomas con su afición/obsesión por aprender juegos de cartas.
Castellano: mi lengua materna. Afortunada yo por crecer aprendiendo una lengua tan bonita y tan útil, y desgraciada por no crecer con más de una.
Inglés: desde 5º de EGB. Más o menos desde esa edad me he ido aficionando a la música en ese idioma, así que mi dominio del inglés ha crecido con mi afición al brit pop. De ahí me viene también la vocación de traductora xD. En 1º o 2º de BUP, en vista de que no abundaban las carreras interesantes porque la mayoría eran de Ciencias:P, decidí con buen criterio que si había una carrera que versaba sobre aprender inglés y leer novelas, era la mía. Además cuando me iba a jugar torneos podía tanto leer novelas como practicar inglés, así que encima todo eran ventajas:)
Catalán: actualmente mi segunda L2. Tras comprobar que entendía prácticamente todo sin apenas esfuerzo, a pesar de que mi input en esa lengua era sobre todo torderés;-), como los catalanes que conocía por ahí me caían bien (ahora que lo pienso, sí que soy rara), y cuando conocí BCN me enamoré (de la ciudad, mal pensados) me dije "pues ya puestos lo podía aprender en condiciones". Fueron los 8 créditos más fáciles de mi vida en UniOvi. Ya instalada aquí, cada día aprendo algo nuevo, y aunque no se lo crean los de TeleMadrid, no me pegan ni me denuncian cuando no lo uso.
Alemán: cuando entré en Filología Inglesa tenía que escoger un segundo idioma. De aquellas leía muuuuuucha literatura francesa (hoy en día "Madame Bovary", "Rojo y Negro" y "Las amistades peligrosas" siguen en mi lista de libros favoritos) y casí cojo el francés... pero el destino en forma de pueblo polaco donde la gente solamente entendía alemán y ruso se interpuso en mi camino. En realidad viajando por Europa, donde no te entiendan en inglés probablemente te entiendan en alemán, así que igualmente parece una lengua bastante útil. Más tarde he tenido la oportunidad de conocer Alemania y me alegro de la elección que tomé hace ya... Bufffff 10 años!!!!! Como Sylvia Plath, viviré obsesionada con dominar el alemán pero no lo lograré nunca.
Ruso: mmmmmm, igual sí que soy rara. Hace muuuuuuuchos años me leí "Mi Sistema" y me encantó, pero había cosas muy raras, vamos, que la traducción no era muy buena. Así que, movida por esos ideales que todos tenemos en la adolescencia, se me ocurrió que aprendería ruso para traducir ese libro bien y que la gente pudiera disfrutarlo. Y empecé así, por mi cuenta. Posteriormente fui a un año de clases y la verdad es que aprendí bastante, pero lo tengo medio olvidado. Cuando haya tiempo volveré. De momento me sirve para leer los carteles con los nombres de los jugadores, y en Bulgaria podía entender rótulos de comercios, de tráfico, etc. También me ayudó a comer en Polonia porque muchas palabras se parecen.
Portugués: en Oviedo tenía que hacer créditos de libre elección, y de todo el catálogo de asignaturas solamente me atraía hacer algún idioma porque el resto de opciones me parecían un peñazo. ¿Qué mejor que otra lengua de la Península? Además en los saraos internacionales los portugueses son de lo mejor que hay: buena gente, simpáticos, y no están todo el día hablando de ajedrez.
Latín y griego: los hice en el bachillerato y se me daban bastante bien. El latín ayuda muchísimo a aprender y a entender otras lenguas románicas y el griego, además de para ver partidos de baloncesto, para entender "palabros" científicos.
Griego Moderno: mis últimos créditos de libre elección en UniOvi. Es que la ofertaban por internet... Gracias a la base de griego clásico, estaba tirado. Si en octubre voy al Europeo desempolvaré antes mis apuntes.
Holandés: sabiendo inglés y alemán, es relativamente fácil leer holandés. He estado dos veces en los Países Bajos: aquello es precioso, la gente es majísima... me da pena no saber holandés pero todos saben inglés, alemán, y los ajedrecistas holandeses hablan castellano mejor de lo que yo hablaré su lengua en toda mi vida. Para leer rótulos y cartas de restaurantes me arreglo, eso sí, si me hablan ni entiendo un carajo.
Esperanto: por la influencia de algunos UniLangers, una temporada me dio por aprenderlo. Tampoco progresé demasiado porque estaba a más cosas, pero tiene su utilidad.
Euskera: siempre había tenido curiosidad y ahora llevo dos meses de clases en la UAB. Es que la última vez que fui a Pamplona me dio pena comprobar que en todos los canales de la tele entendía alguna palabra menos en ETB. Ya está arreglado: en Donostia vi un rato de un partido de baloncesto (mientras mi novio me llamaba friki no sé por qué:P) y pillaba cosillas:-)
Polaco: por supuesto no tengo el dominio de Wiktorku, y de hecho solo me acuerdo de cómo se piden cacharros (memoria selectiva), de dar las gracias (educación ante todo) y de decir "no hablo polaco" (la frase "no hablo X" me sale en muchos idiomas, y es tremendamente útil si allá por donde vas se te acercan todos los raros, como es mi caso). En el pueblecito polaco en el que jugué un Mundial sub20 me compré por (creo que literalmente) cuatro duros un librito de frases Hiszpansko-Polski que dio mucho juego, sobre todo cuando había que conseguir comida. Con ese libro hice mis pinitos en la interpretación de enlace:-)
Rumano y sueco: lo típico que haces amigos de un sitio y aprendes unas palabras de su idioma y ellos del tuyo. Aquellos maravillosos años en que venían rumanos majos a jugar Avilés... y aquellos suecos tarados que también estaban haciendo tandem en Bochum... Pero bueno, como todo lo que no se practica, lo he olvidado casi por completo.
Pues eso, que tampoco soy tan rara... ;-)
P.d. El título de la entrada es de un libro muy mítico de George Steiner.
7 comentaris:
Jolín, chica, no todo el mundo puede estar a tu nivel.
Joder!!!!
Me hace gracia que siempre que digo que estudio Traducción e Interpretación la respuesta suele ser "uy pues entonces sabrás muchos idiomas ¿no?"
Y tú que les respondes... que sí :P porque vaya tela.
A mí los idiomas no se me dan, no son lo mío,sufría para aprobar el inglés del colegio; aunque no significa que no me gusten y alguna que otra cosa intento aprender cuando me da la venada, pero antes de ir a cosas más complicadas debería ponerme con el "inglish" porque da pena oirme, y leyéndolo no voy mucho más allá XD
Tienes que retomar lo del esperanto :-)
Aber du kennst viele Sprache!!
Graden av penetration varierar, naturligvits.
ik spreek niet zelfs goed Spaans (I hope this last sentence is right).
Bueno, si es por presumir de idiomas, yo soy capaz de jurar en un perfecto arameo, cosa que hago a menudo (cada vez que me dejo cosas en un tablero).
Saludos
LERMA
Vaya, se me olvidó el Nem, köszönöm
Qué máquina... :)
Pero te falta el georgiano.... :)
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